martes, 18 de enero de 2011

¿Qué es Tai Chi, qué es Chi Kung?



Lo que se cuenta.


En todas las páginas de tai chi y chi kung que os encontréis, hay unas explicaciones magníficas. Hablamos de una meditación en movimiento, del arte de la armonía, de boxeo en las sombras, de danza suave cuando  es tai chi. De trabajo con la energía, de ejercicio para la salud y la longevidad cuando es chi kung... Y muchas más definiciones acertadas. Y los beneficios, múltiples para el cuerpo y la mente: flexibilidad, equilibrio, alivio del dolor, mejora en los problemas óseos, aparato respiratorio, digestivo, locomotor... Mejora de la circulación sanguínea, tensión arterial... Mejora del estrés, llegando a conseguir más calma interior. Y un largo etcétera.

Tai chi  al fin y al cabo es un arte marcial, a mí me gusta decir interno por su lentitud, y chi kung está formado por diferentes series de ejercicios encaminados a desbloquear la energía, a hacer que fluya libremente por el interior del cuerpo. Chi kung también engloba la medicina tradicional china, la fitoterapia y el masaje tui na, es decir, todo trabajo cuyo fin sea movilizar la energía, incluyendo las series de ejercicios y las artes marciales en general, entre ellas el tai chi chuan -chuan quiere decir arte marcial-.

Lo que te cuento

Aparte de todo esto, para mí  tai chi es como una danza serena, donde se van entrelazando suaves movimientos sin principio ni fin, en un estado de atención totalmente despierto, donde todo lo ves y todo lo integras, sin esfuerzo ni cansancio, sintiendo el cuerpo liviano pero bien enraizado, y dejando que los brazos floten como nubes, en un conjunto armónico y vital. Es un viaje placentero del que se obtienen inmensos beneficios a nivel físico y emocional.

Y como todo en la vida, requiere disciplina, constancia y ganas de aprender. Si tu actitud es abierta, sencilla y paciente, podrás conseguir despejar tu mente y relajar tu cuerpo como siempre has deseado, pero nunca obsesionarte con el aprendizaje porque no existen medallas, ganadores ni meta. Sólo estás tú contigo mismo, danzando con tu cuerpo, sonriendo a tu corazón, abriendo tus pulmones, y ofreciéndote, porque te lo mereces, el mayor regalo: salud y bienestar.

Chi kung, con sus series de ejercicios fáciles de aprender y realizar, se convierte para mí en la gimnasia más asequible y poderosa que existe, muy diferente a las gimnasias tradicionales de nuestra parte del mundo. Por eso llama tanto la atención, porque, como muchos alumnos me dicen, "es sorprendente que unos movimientos tan lentos y suaves, puedan ser tan beneficiosos para el cuerpo y ayuden tanto a calmar la mente y conectar con tu interior."


Para terminar, decirte que puede convertirse en una filosofía de vida si lo realizas como un fin en sí mismo, como algo que realmente puede dar  luz a tu sentir cotidiano. Si es así, bienvenido al mundo de tai chi chi kung. Si no es así, bienvenido igualmente.

Si algo quieres que cambie en tu vida, algo tiene que cambiar primero en ti.

4 comentarios:

  1. y qué bien lo cuentas. tu alma se deja ver en tus palabras. vives taichi.

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  2. Que puedo decir aquí por escrito, que no te haya dicho ya en persona...El conocerte cambió mi vida. Primero, como profesora eres excepcional, sabes llegar a la gente y sacar lo mejor de nosotr@s, mejor dicho, nos enseñas a sacar lo mejor de nosotr@s y a valorarlo, lo nuestro y lo de los demás.Y contigo, a demás de aprender la forma, he aprendido a vivir el Tai Chi hasta el punto de querer dedicarme a transmitir lo que me enseñaste.
    Como amiga, que te puedo decir....no hay palabras suficientes....
    Namaste, maestra.

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  3. las palabras de ruth me llegan al alma. tantos años haciendo taichi juntas,aprendiendo constantemente y disfrutando de este arte. gracias. namasté.

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  4. Lo que el Tai chi me hizo.


    Mi historia anterior al momento en que entre en contacto con el Tai chi no es importante, pero para poneros en antecedentes digamos que debido a diversos motivos yo salía de un pozo de negrura, los que hayáis pasado por esa experiencia supongo que sabéis de lo que hablo, en fin, no se como me decidí a empezar con unas clases de Tai chi que daban en el centro cultural de Vicalvaro.


    Comencé practicando un estilo mas orientado al combate, pero que supo llamar mi atención, al cabo de un año mas o menos y debido a un cambio de profesores conocí a Isabel a la que considero mi gran maestra y empecé a practicar un estilo mucho mas pausado y orientado al interior, con este estilo el Yang B, aprendí a sentir la energía que me rodea, a calmarme y a sentir autentica paz interior cada vez que practicaba.


    Todo esto hizo que cada vez me interesara mas en avanzar, luego vinieron las practicas de Chi kung y de meditación, también de la mano de Isabel y poco a poco mi vida fue cambiando de manera radical, donde antes había nervios y mal genio, se fue llenando de serenidad, empecé a preocuparme de mi cuerpo y mi mente, deje de lado pequeños vicios, me alimente de forma mas sana y natural, la meditación me ayudo a conocer mi interior y comprender que debía ponerme en paz conmigo mismo.


    En los retiros aprendí a prescindir de televisión, radio, etc., y a valorar mas la naturaleza que nos rodeaba, en resumidas cuentas un cambio total en mi manera de ver las cosas, de esto hace ya unos cuantos años y en este tiempo he aprendido a trabajar con la energía, convirtiéndome en maestro de varias modalidades de Reiki, también he aprendido a prescindir de muchas cosas superfluas que aunque pudieran aumentar mi estatus social, no me ayudaban a ser yo mismo y quizás lo mas importante para algunos a pesar de mis problemas de espalda no he vuelto a tener necesidad de acudir a un medico, pues no me ha vuelto a doler.


    Yo sigo avanzando por el camino que entonces me trace, el de ser realmente persona, no es nada sencillo no nos engañemos a esta sociedad no le interesan las personas y nos pone trabas con su incomprensión, pero me he dado cuenta de lo poco que hace falta para ser feliz, lo fácil que es disfrutar de las cosas sencillas como ver abrirse una flor, contemplar la luna, la sonrisa de un niño, esas cosas que vemos a diario y de las que nuestra continua prisa nos impide disfrutar, esto es lo que el Tai chi ha hecho por mi, preguntaros lo que puede hacer por vosotros.


    Mariano Rosas.

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