lunes, 17 de enero de 2011

Movimiento y quietud

Dicen que parar es importante.
Dicen que moverse también, no estar quieto para no acumular olvido.
Estirar para ser flexible y no encogerse sobre uno mismo, esperando que una mano nos rescate de la nada.
Nadie va en tu busca si tú no alzas la mirada para encontrar el camino.
Nadie valora tu mundo si no preguntas primero el porqué de un llanto o una risa.
Puede tu universo ser pequeño, pero es tuyo y está dentro del de todos.
Puede que pienses que tus estrellitas apenas brillan entre tanto estallido majestuoso, pero son tuyas y están dentro de las otras, haciendo que tu luz sea parte de tan fantástica obra.
Puede que hoy te sientas la supernova portadora del misterio y mañana te sientas un trocito de vacío, temeroso y tembloroso, pero recuerda que de eso estamos hechos: de luz y de nada.

Dicen que si me quedo quieta, me apago. Pero hay momentos en los que prefiero no moverme porque es cuando más viva me siento, sin voces en mi mente, sin pasado y sin futuro.
Dicen que si me muevo puedo equivocarme y desviar mi rumbo, pero creo que esa es la vida: arriesgarse e ir construyendo un destino para siempre incierto.
Así que me muevo y me detengo, me relajo y me pierdo entre las más ignotas coordenadas.
No hagas caso de nadie y vivencia tus segundos como si fueran eternos.
No te creas nada porque nadie está dentro de ti.
Y si te mueves hazlo despacio, aunque te vean correr.
Y si tu estado es de quietud, viaja a la velocidad de la luz entre planetas, galaxias y universos paralelos.
La respuesta está justo un paso más allá de tu último paso.


Isabel

"Dentro del movimiento hay tranquilidad y dentro de la tranquilidad hay movimiento." Peter Yang






3 comentarios:

  1. Se llena de poesía tu blog con ésta definición tan maravillosa del movimiento y de la quietud. Gracias por éstas palabras!!!

    ResponderEliminar
  2. eres armonía,paz y amor. haces poesía no sólo con tus palabras,sino con tu forma de transmitir tus conocimientos y el modo en que vives taichi.

    ResponderEliminar
  3. parar,parar,parar... si nos paráramos de verdad sólo un ratito al día aprenderíamos mucho sobre nosotros,que está ahí,pero no lo sabemos. parad y respirad...

    ResponderEliminar